sábado, 19 de mayo de 2012

Y llegó el PP.

   Ya pasados los 100 días de gracia del nuevo gobierno, empezaremos a criticar ya lagunas de las cosas que está haciendo mal, bajo mi punto de vista.
   Para empezar, nos mintieron. El PSOE por no reconocer el déficit real y el PP, que suponiéndolo, hizo promesas que a las pocas semanas se tornaron en lo contrario.
   Parto de la base, que la única explicación posible es que se estan tomando medidas de cara a los mercados y a Alemania, y que aunque hubiera ganado Perez Rubalcaba, las medidas no serían muy diferentes. Uno de los errores de base, es que el PP ha traicionado su ideario y en contra de lo prometido, lo predicado, y lo que hizo Aznar en su primera legislatura, bajar los impuestos para reactivar el consumo, los ha subido, ¡y de que manera! Lo malo, es que todavía esto no ha terminado.
   No paramos de oir comparaciones odiosas y repugnantes con el resto de Europa. Se nos compara siempre en lo que pagamos, pero nunca en lo que ganamos y en los servicios que tenemos. Toda la culpa la tienen los políticos, sean del signo que sean, de haber hecho creer durante toda la época de bonanza, que todo es gratis. Los servicios, la sanidad, la educación, etc. Por eso, cuando vienen los recortes empiezan las protestas. Cuando hay recortes, es porque lo que se recorta cuesta dinero, y mucho. Nada es gratis, excepto para los inmigrantes sin papeles. Y no nos rasguemos las vestiduras, porque cualquiera de nosotros o de los super mega guais de este país, cuando vas a otro sin papeles, te deportan, o sea, te echan. ¡Ah! y sin salir en ningún periódico ni informativo de tv.
  Bueno, a lo que iba. El gobierno actual del PP ha entrado con eso que José Mota llama "ansia viva". Estan tomando una enorme cantidad de medidas, pero solo en contra de los mismos. No se ha recortado en grandes cargos, en coches oficiales, en Instituciones absurdas e innecesarias a la par que costosas. El primer "gran timo" al ciudadano ha sido la Reforma Laboral, donde le han puesto en bandeja al empresario el eliminar de sus plantillas a gente por "2 €" y los que se quedan teniendo que aceptar bajadas de sueldos. Y no es demagogia, porque sin ir mas lejos en la farmaceútica donde trabajo lo están haciendo así. Y todo de acuerdo a la nueva ley.
   Se están subiendo cantidad de impuestos, precios, servicios, tasas y todo eso, lejos de animar el consumo, lo está retrayendo, con lo cual, el efecto deseado, que es el de recaudar mas, se les vuelve en contra. Y si se consume menos, mas paro. Pero eso si, "los mercados" y Alemania corriéndose de gusto.
   Que la culpa es de la herencia recibida del anterior Gobierno, por supuesto, pero del anterior, tambien, y los de Aznar, y los de Felipe Gonzalez. El gran error del Sr. Aznar, fué basar el modelo económico en "el ladrillo". Eso atrajo a muchos extranjeros a España, entre otras cosas a beneficiarse del sol y de la Sanidad. Cuando entró ZP, se propuso cargarse el ladrillo, y lo consiguió. Pero nadie le advirtió de todo lo que rodeaba a ese sector. Luego se propuso cambiar el modelo económico creyendo él y "sus palmeros" que eso se hace en 6 o 7 años. Y no solo no lo consiguió, ya que no tenía ni una idea clara, sino que contribuyó a que el desastre fuera mayor. El objetivo último; los votos. Sabiendo que había que hacer reformas, no hizo ni una seria y como todas las encuestas auguraban la devacle socialista en las elecciones, decidieron no hacer nada para que fuera el PP el que tuviera que tomar las medidas drásticas e impopulares. Es lo que mejor ha hecho siempre el PSOE. Planificar sus victorias. Así en las próximas elecciones tendrá el discurso hecho. "Vino la derecha ha hacer recortes y bla, bla, bla ,bla....."
   En fin, España no se merece los políticos que tiene. Se necesita una renovación profunda de la clase política, pero eso, no lo vamos a ver en mucho tiempo. En fin.....

martes, 8 de mayo de 2012


DE LOS ERES Y LA NUEVA LEGISLACIÓN LABORAL: LA PARADÓJICA SITUACIÓN DE MERCK ESPAÑA


Merck es el laboratorio farmacéutico más antiguo del mundo, creado en Alemania en 1668. Actualmente, y debido a la convulsa situación a nivel mundial y a una inadecuada gestión, nos encontramos inmersos en un proceso de reestructuración a nivel mundial que nos afectará, de alguna manera, a los 30.000 empleados de la compañía.
En España somos cerca de 900 personas las que, durante años, luchamos en nuestro día a día por sacar nuestro trabajo adelante de la mejor manera posible. Contamos con una serie de valores que rigen nuestro trabajo, y que la cúpula de dirección propugna a bombo y platillo: Valentía, Responsabilidad, Respeto, Integridad y Transparencia, y todos y cada uno de nosotros los aplicamos diariamente intentando optimizar la totalidad de nuestras acciones en aras del beneficio general. La propia Merck, en su manual de acogida a nuevos empleados, escribe: “En Merck estamos convencidos de que nuestro éxito empresarial es el resultado del compromiso y el trabajo de todos los profesionales que formamos la compañía. Por eso, en Merck, apostamos por las personas”.
En el año 2011, el grupo Merck ingresó la friolera de 10.726 millones de euros, con un resultado operativo en la división farmacéutica de 304 millones de euros, lo que les llevó a repartir un dividendo con los accionistas un 20% superior al anterior. En el caso de Merck España, en el mismo período 2011 presentó 30 millones de euros de beneficio de explotación.
Sin embargo, al amparo de la nueva legislación laboral, el pasado 25 de abril se abrió un ERE que afectará a 230 personas en España. Constituida la mesa de negociación, la actitud de la empresa está siendo cualquier cosa excepto valiente, responsable, respetuosa, íntegra o transparente. Qué decir de su compromiso con las personas... Los representantes de los trabajadores están intentando llegar a una solución lo menos dolorosa posible para aquéllos que se queden sin empleo, buscando en primer lugar prejubilaciones, bajas incentivadas, e incluso proponiendo ideas novedosas para evitar que el impacto del expediente sea tan grande. Pero la empresa no atiende a ninguna sugerencia y demuestra que esos valores que tanto predica los aplicamos unos más que los otros. Es, cuando menos, moralmente cuestionable esta actitud en una empresa que hace gala de la importancia de los trabajadores y que además tiene un firme compromiso con la responsabilidad social corporativa, que se muestra, por ejemplo, en la inversión anual que hacen en la Fundación Salud 2000, que asciende 1,5 millones de euros.
El problema surge cuando la legislación actual marca un mes como plazo máximo para la negociación, y transcurrido dicho plazo sin llegar a un acuerdo, el ERE se ejecuta igualmente, corriendo a cargo de la parte social su impugnación en vía judicial.
¿¿Para qué molestarse en negociar, entonces?? ¿¿Es ética esta actitud viendo las cuentas de Merck y su denostado compromiso con la sociedad y sus trabajadores?? 
Creemos que no, pero la única manera que tenemos de denunciarlo es apelar a la opinión pública.