Huelga General.
   Esta mañana he oído un dato para la reflexión sobre el movimiento sindical actual en España. Durante el anterior gobierno, los sindicatos recibían una subvención anual de 20 millones de euros. A eso había que sumar las ayudas que aportan las Comunidades Autónomas, los EREs y los comités de empresa. Además, estos sindicatos solo están metidos mayoritariamente en la gran industria y en la función pública. Si tuvieran que vivir de las cuotas de sus afiliados, apañados iban. Y es de eso de lo que tenían que vivir. Una vez, que el actual gobierno les ha bajado la cuantía de las subvenciones, entonces se acuerdan de hacer huelgas.
   Algún periódico ha dado el dato. A Felipe Gonzalez tardaron seis años en hacerle una huelga general. A Aznar, cinco años. A ZP, siete. Y a Rajoy menos de cien días.
   Esto tiene mas de económico que de ideológico. Mientras con el anterior gobierno, bien pagados, se mantuvieron lejos de cualquier movimiento en la calle mientras se destruían mas 3 millones de empleos, ahora, sin saber el resultado final de una reforma laboral, que ni siquiera se ha puesto en marcha todavía, se echan a la calle, nada menos que con una huelga general, claro, después de "haber chupado" tirón mediático del 11 M. Menuda cara dura y falta de sensibilidad.
   Para comprobar el éxito o no de la huelga general, deberían dejar a la libre voluntad del trabajador acudir a la huelga o no. Y ¿como se consigue eso? Pues que los piquetes informativos, léase coercitivos o mas bien coactivos, dejaran acudir a su puesto de trabajo al que quiera trabajar, y no apedrear coches, autobuses, taxis y furgonetas de reparto de gente que quiera, libremente, no hacer huelga. Amén de cortar carreteras, autovías y echar silicona a algunas cerraduras de colegios, institutos, universidades, oficinas de banca, etc. Libertad ante todo.
   Para que el movimiento sindical fuese de acorde con los tiempos, deberían vivir de las cuotas de los afiliados. Fuera subvenciones. Deberían buscar afiliados en las PYMES. Pero claro, esas no interesan. No salen en las noticias, pero sin embargo son el grueso de la masa laboral del país. Entonces, una huelga con respuesta masiva, sería mucho mas creíble y reivindicativa y sobre todo representativa.
   Basta ya de hipocresías y de envolverlo todo en los intereses de los trabajadores. Es todo una cuestión económica. Y si no queda claro, pues lo que hizo la Consejera de Andalucía en el último Consejo de Política Territorial donde se fijó el déficit del 1,5 % como tope de gasto para las Comunidades Autónomas. Según el ABC, creo recordar, le dijo al Ministro que si flexibilizaba ese 1,5 %, es decir, les dejaba endeudarse mas, se evitaría mucha conflictividad en las calles. De lo contrario, tendría las calles "muy calientes". Pero ¿que ideología es esta? Pues la del puñetero dinero. Y olvidémonos de izquierdas, derechas y sindicatos que velan por el bienestar de los trabajadores.
   Y por cierto, yo que estoy de baja, ¿como hago huelga? ¿Voy a trabajar?, ¿dejo de tomarme las pastillas? ¡Menudo dilema!
   Y por supuesto, los liberados sindicales, a picar piedra y a currar como "todo cristo". Y el que quiera dedicarse al sindicato, en su tiempo libre. Sobre todo en la empresa pública que les pagamos entre todos el que se rasquen los testículos u ovarios todo el santísimo día.